A finales de siglo, se arreglaron las logias y terrazas del lado que da al mar y al jardín de estilo napolitano. Hoy este es quizás el punto más interesante del complejo por la atmósfera dada por la pérgola sostenida por columnas de ladrillo y mayólica napolitana, por la encantadora vista del Golfo de Vasto y por los restos arquitectónicos del primer edificio, incluida una hermosa ventana con parteluz. en estilo gótico flamígero.

Tras el fin del marquesado, declarado en 1808, los d’Avalos se retiraron a Nápoles. El edificio fue vendido a particulares y dividido en apartamentos y locales comerciales. Durante muchos años se alojó un cine en su teatro. En 1974 fue adquirido casi en su totalidad por el municipio de Vasto y utilizado como museo. Hoy alberga el Museo Arqueológico, el Museo del Traje Antiguo y la Pinacoteca. El jardín napolitano forma parte del itinerario de visita del museo, pero también alberga varios eventos de verano. El patio del edificio, por otro lado, se utiliza a veces para conciertos.

El edificio fue restaurado casi por completo por el municipio de Vasto en los años 90 del siglo pasado. No del todo porque la esquina noreste, con la gran terraza con vistas al mar, sigue siendo privada. Por lo tanto, si alguna vez desea vivir en Vasto en el palacio de sus marqueses, sepa que es un sueño que aún se puede alcanzar.